Este texto es una fábula, la cual
cuenta la historia sobre un pastor que tenía un asno y un caballo. Un día iban
subiendo las montañas donde cada uno de ellos llevaba carga, pero el asno iba
muy cansado, por lo que le pide al caballo ayuda para llevar un fardo, el
caballo se hizo el sordo y prefirió no ayudar a su compañero. A poco andar el
asno se desplomó y no pudo seguir, por lo que el pastor tomó toda la carga que
este llevaba y se la puso al caballo. Por lo tanto la moraleja de esta fábula
es enseñarles a los niños que es preferible ayudar al otro cuando lo necesite, porque si no lo haces te puedes estar
perjudicando a ti mismo y que así puedan tomar conciencia de que hay que
colaborar con los otros.
Esta fábula me pareció muy buena
para enseñar a los niños a colaborar con los demás, ya que así fomentamos que
tengan una buena convivencia unos con otros y sean solidarios desde pequeños.
Elegí dos aprendizajes esperados
los cuales son: 4) “Ampliar sus prácticas
de convivencia social en nuevas situaciones, para afianzar y profundizar la
colaboración y relación con los otros.” Y 6) “Contribuir con los demás, aportando a personas o grupos de ellas con su
compañía, sus conocimientos, sus afectos, sus expresiones.” Estos aprendizajes esperados se encuentran
dentro del ámbito de Formación personal y social, en el núcleo de Convivencia y
dentro del eje de Participación y colaboración, enfocados en los niños
pertenecientes al segundo ciclo, es decir, desde los 3 a los 6 años.
María Ignacia Quijada
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